Cada vez son más los vehículos en nuestras carreteras y calles que portan cristales tintados, por ley en los cristales laterales traseros y luneta trasera. En artículos anteriores de MundoLuna hablamos ya de las ventajas que ofrecen, como privacidad, seguridad y mayor protección frente a rayos UVA. Al limitar la incidencia de los rayos de sol, en los meses de verano contribuyen a tener un habitáculo más fresco. Esto ayuda no solo a nivel de confort, sino a nivel energético ya que no hace falta poner tan fuerte el aire acondicionado.

Ahora bien, las láminas para tintar cristales pueden estar fabricadas de diferentes maneras y de eso vamos a tratar aquí. En definitiva, las láminas se pueden diferenciar en cuatro clases diferentes. Su estructura varía, así como su nivel de calidad y su duración y efectividad.

En los cuatro tipos que se verán a continuación es posible que se les añada una capa de aluminio en la superficie con sus ventajas e inconvenientes. Sus dos principales ventajas es contar con un color más estable además de ser más reflectivas gracias a las propiedades del aluminio. Ahora bien, es posible que causen algún problema con las señales de los equipos de radio así como con teléfonos móviles. Esto se debe a que el aluminio es capaz de redirigir las ondas.

Tipo Pegamento

Son en general el tipo de láminas de peor calidad. El color de la lámina está en el propio pegamento con el que la lámina se adhiere al cristal. Existen también algunas clases de lámina de pegamento en las que el tintado está en el pegamento que unen las láminas de poliéster. Su principal ventaja es ser muy baratas, las más económicas de todo el mercado en la actualidad.

Se pueden encontrar con dos estructuras diferentes. La más simple consiste en el liner, con el adhesivo tintado – el pegamento –, la lámina de PET (politereftalato de Etileno) transparente y una capa antiraya. Otra variedad de este tipo es añadir un pegamento transparente y una lámina de PET transparente entre el liner y el adhesivo tintado.

A costa de ser las más baratas, son las menos efectivas, de hecho solo se fabrican en China y Corea. El poliéster suele ser de muy baja calidad y suele decolorarse al cabo del poco tiempo, sobre todo las de estructuras más sencillas. La protección frente a rayos ultravioleta suele estar en torno al 95%.

Tintadas

Estas son las láminas tradicionales, también de las formas más extendidas. Son unas dos o tres veces más caras que las de tipo pegamento, pero generalmente a nivel de calidad compensa esa diferencia de precio. De hecho, según las condiciones climatológicas en las que duerma el coche, pueden llegar a durar hasta unos 5 años antes de decolorarse. Su principal característica es que la lámina está tintada a baja temperatura, a diferencia de otros procesos.

De nuevo, encontramos dos posibilidades de estructura de las láminas tintadas. En este caso, se compone de un liner, el adhesivo (pegamento) transparente, la lámina PET tintada y la capa antiraya. Las más desarrolladas añaden por encima del liner otra lámina de PET con su adhesivo correspondiente. Esta lámina de PET puede ser tanto transparente como tintada, lo que se conoce como coating. De hecho, existen algunas láminas de este tipo con 3 ply en lugar de uno o dos.

Las mejores láminas tintadas del mercado pueden llegar a alcanzar un 99% de protección frente a rayos UV, además de ser las más duraderas. Esto no solo es un indicador del nivel de protección sino del nivel de calidad, ya que existe una relación directa entre el nivel de calidad del tintado con el del poliéster.

Deep dyed

Empezamos aquí con las que se conocen como láminas de última generación, pues apenas llevan unos años en el mercado. Al menos en Europa, pues en Estados Unidos llevan cerca de diez años fabricándose de este tipo. En este caso, el poliéster se tinta a alta temperatura con un gel de color en caliente, de manera que el tintado entra dentro del mismo. Es decir, no se trata de una capa que lo envuelva. Esto hace que el color sea más estable, si bien esto depende también de la calidad de la fabricación.

La estructura, tanto con uno como con dos ply, es muy similar a la de las láminas tintadas tradicionales. Es decir, con el liner, el adhesivo, el PET tintado profundo y la capa antiraya. Lo mismo ocurre con las de varios ply, pudiendo verse láminas muy oscuras con tres ply ya que llevan tres láminas con tintado profundo.

En función de las condiciones, las láminas Deep dyed (tintado profundo) pueden llegar a durar hasta 10 años antes de comenzar a decolorarse. Las de mejor calidad pueden llegar al 99% de protección ultravioleta – al mismo tiempo, estas serán las más duraderas. Cada vez se puede ver a más fabricantes utilizando este tipo de proceso, no solo en el otro lado del charco.

Extruded

De manera similar a las de tintado profundo, son láminas tintadas de última generación, aunque estas en realidad aparecieron en el mercado un poco antes. En la actualidad solo se encuentran en Estados Unidos y principalmente solo las realiza un fabricante en concreto. El motivo de ello es que son las más caras del mercado.

En las Extruidas, el color se funde con el poliéster a alta temperatura y después se lamina. De esta manera, el color se reparte de manera uniforme por toda la superficie. La estructura es similar a las láminas tintadas y las de tintado profundo, con liner, adhesivo, PET tintado por extrusión en este caso y la capa antiraya. De igual manera se pueden encontrar láminas extruidas con dos y tres ply, siendo estas de un tono muy oscuro.

Como las láminas de tintado profundo, las láminas extruidas pueden aguantar sin decolorarse hasta unos diez años. Asimismo, su protección ante rayos ultravioleta puede ser del 99% o superior, siendo en efecto productos de muy alta calidad. Ahora bien, por ahora no están muy extendidas por Europa, siendo las de tintado profundo mucho más populares en la actualidad. El motivo inicial era su precio, pero en la actualidad se ha igualado al de los otros tipos de láminas.

No obstante, en España tenemos la empresa Energysa que ha apostado por las láminas extruidas. De hecho, componen buena parte de su catálogo actual. Son las láminas con mayor duración de todo el mercado, con gamas como las Gray o las Iridium. Además, pueden ser tratadas por deposición al vacío o por sputterización de partículas metálicas. También es posible tratarlas con partículas cerámicas para mejorar sus propiedades térmicas.