Pueden ser muchos los motivos de la rotura de un cristal o un parabrisas en nuestros coches, si bien la más habitual es por impacto contundente de un objeto de cierto peso, ya sea una roca o cualquier otro elemento. Para los expertos en investigación de accidentes es necesario en muchos casos conocer la causa de la rotura, para lo cual existen una serie de pasos a seguir como se mostró en el reciente webinar de Arup “Broken Glass: How and Why to Find the Origin of Failure Among the Fragments” explicado por el experto Graham Dodd.
“La mayoría de nosotros trabajamos en una construcción contractual así que esto es a menudo un asunto importante. ¿Se dañó antes de ser instalado? ¿Había algo erróneo en la fabricación del sistema?”, destacó Dodd.
El primer motivo argumentado para saber cómo determinar la causa de cristales rotos es para prevenir o controlar otros posibles fallos con el fin de mantener la seguridad de las personas intacta. El segundo motivo era el de establecer la responsabilidad de la rotura del cristal, algo que involucra a partes como talleres o aseguradoras en el caso de los parabrisas y otros cristales de vehículos.
Pasos para deducir las causas de la rotura
Como nos han enseñado con el paso de los años las diferentes series de CSI o shows de televisión similares, para que una investigación clarifique el origen de algo es necesario seguir una serie de paso. Eso mismo mostró Dodd, una serie de pasos a través de los cuales es posible confirmar el motivo de la rotura de un cristal.
- Guardar el cristal para una examinación profunda: puede parecer que los cristales rotos son tan solo eso y un residuo pidiendo ser tirado al contenedor, pero nada más lejos de la realidad. Continuando con el símil de CSI, los pedazos de cristal no son otra cosa que el cuerpo en el escenario de un crimen de cualquier serie de este género.
- Observar el patrón general de las grietas: siguiendo la dirección de las grietas es más fácil determinar la reacción en cadena que llevó a que se rompiese el cristal – no muy distinto a cuando Horatio Caine o su equipo analizan manchas de sangre en el escenario del crimen.
- Establecer una dirección de la propagación: la idea es encontrar el punto donde se originó la rotura.
- Estudiar las características del origen: aquí es el momento donde, según Dodd, se requiere de mayor paciencia para no llegar a conclusiones erróneas
- Quedarse con los fragmentos del origen: cuando se complete la investigación es importante guardar estos fragmentos, incluso si se tira el resto del cristal, en caso de que tenga que realizarse una segunda investigación y examinación.
- Aplicar una fractografía: con esto será posible crear una estimación del estrés que sufrió el cristal en el momento en el que comenzó a despedazarse.
De este modo, será posible demostrar y determinar con mayor certeza la causa de roturas de parabrisas. Si bien la más común es el impacto de otro objeto contra el cristal pueden producirse otros como un estrés termal o algún defecto que pueda encontrarse en la fabricación/instalación del mismo.
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