Entre los próximos días 22 y 23 de agosto tendrá lugar una de las grandes carreras a nivel mundial, las 500 Millas de Indianápolis. Para esta edición 2020 tendremos en carrera a dos españoles, el joven Álex Palou y nada menos que Fernando Alonso, bicampeón mundial de Fórmula 1 así como campeón mundial de resistencia y dos veces ganador de las 24 Horas de Le Mans. Los dos, como el resto del elenco que competirá en la mítica prueba norteamericana, llevarán en sus monoplazas un parabrisas especial fabricado en policarbonato.

Desde esta temporada, la IndyCar utiliza en sus monoplazas el Aeroscreen, un parabrisas desarrollado por Red Bull Advanced Technologies. Tras años de desarrollo – y un intento inicial de implantarlo también en la Fórmula 1 – este año se ha aplicado en los monoplazas americanos. Las reacciones a la introducción del Aeroscreen han sido en general bastante buenas desde la primera carrera después de la pandemia del coronavirus.

Los secretos del Aeroscreen

No solo no es un cristal convencional, sino que es policarbonato laminado balístico, utilizando tecnología aeroespacial al igual que los monoplazas de máximo nivel. Esta pantalla cuenta con un elemento calefactor para evitar que se empañe durante la carrera. También lleva una lámina interior antirreflectante de modo que los pilotos no se deslumbren con el sol en ningún momento. Llevan ocho láminas desplegables que van retirando a medida que avanza la carrera y se van ensuciando, ya que no llevan limpiaparabrisas.

El marco de titanio, fabricado por la marca Pankl, está formado por cinco piezas hechas con una impresora 3D soldadas y mecanizadas. El peso del marco es de 12,6 kilogramos y soporta unos 15.400 kilogramos de carga. La lámina en sí pesa unos 7,8 kilogramos y puede soportar el impacto de un objeto de un kilogramo de peso a 350 km/h.

Funciones que cumple

Un parabrisas normal y corriente tiene que cumplir cuatro funciones en la actualidad. Los dos primeros son impedir la entrada al habitáculo de posibles peligros que vengan del exterior y proteger en caso de vuelco. En este último caso realiza la función junto al techo que soporta, aguantando tensiones en todo momento. Las otras dos son apoyo para desplegar el airbag del acompañante en caso de accidente así como albergar los sistemas de seguridad ADAS como cámaras frontales o sensores.

El Aeroscreen cumple las dos primeras, pudiendo detener objetos a gran velocidad así como proteger en caso de vuelco gracias a su arquitectura. Hay que recordar además que el parabrisas de policarbonato no ofrece la misma claridad y visión que uno de cristal. Es por esto que es el cristal el que se utiliza en los coches de producción en serie.

Para esta Indy 500 Palou saldrá séptimo con el dorsal 55, entrando en el Fast Nine en su primera aparición en el ‘Brickyard’. Por su parte, Alonso partirá desde la vigésimo sexta posición con el dorsal 66. Todos llevarán el Aeroscreen, con nombres como Simon Pagenaud, Will Power, Josef Newgarden o el presidente de la IndyCar Jay Frye confirmando la efectividad de este parabrisas de competición.